Bienvenido! a la familia Iglesia De Jesucristo Gratitud

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Cuando recibiste a Cristo en tu corazón y le confesaste con tu boca como el Hijo de Dios y Señor de tu vida, abriste la puerta espiritual de la bendición para ti y tu familia, tu nombre fue inscrito en el Libro de la vida y todos tus pecados fueron perdonados. El próximo paso a dar en el camino de la fe es ser totalmente sumergido en las aguas del bautismo con la ayuda de un ministro de la congregación.

Este paso ya lo hiciste al confesar al Señor Jesucristo como el Hijo de Dios y Salvador de tu vida, ahora te invitamos a compartir tu milagro con nosotros siguiendo el siguiente link y mandandos un mensaje, un delegado del la iglesia se pondrá en contacto contigo para bendecirte y guiarte en tu proceso.

El bautismo en agua es le mandamiento establecido por el Señor Jesus para dar el paso de la fe hacia la salvacion y ser asi muertos, sepultaddos, y resucitados. Sepultando al viejo hombre y recusitar a un nuevo hombre por medio de La Trinidad, Padre, Hijo, y Espiritu Santo. 

Es muy importante que no te prives del hermoso privilegio de participar de la Cena del Señor, nosotros creemos que es una oportunidad más para ponernos a cuentas con Dios, es una comunion personal entre tu y el Señor.  Será una preciosa bendición para ti y tu familia ir sentarse a la mesa con Cristo.

Doctrina basica es la forma bíblica de empezar a seguir más de cerca al Señor; lo puedes hacer escuchando las transmisiones por nuestras redes sociales del la iglesia o por nuestro canal de YouTube. Doctrinarse es profundizar en el conocimiento de la Palabra De Dios para edificación de tu vida. Mientras lo vayas haciendo van a ir cayendo las cadenas que tenían atada a tu mente espiritual y vas a madurar en tu conocimiento del Señor. 

Busca con todo tu corazón ser bautizado por el Espíritu Santo, ese es un regalo que el Señor te dará en su momento, pero debes anhelarlo. Una de las manifestaciones que acompañan ese bautismo es el hablar en nuevas lenguas espirituales que no podemos entender pero nuestro espíritu si lo hace.